La fijación de nuestra ortografía es el resultado de un largo proceso de constantes ajustes y reajustes entre la pronunciación y la etimología, gobernado por la costumbre lingüística. Entre ortografía y pronunciación existen, en consecuencia, desajustes motivados por la evolución fonética del idioma, por sus variedades dialectales (el español se extiende por más de veinte países) y por la misma tradición ortográfica.
Así, en nuestro sistema gráfico se encuentran casos de fonemas representados por un dígrafo o grupo de dos letras, letras que pueden representar más de un fonema, fonemas que pueden ser representados por varias letras, una letra que representa un grupo de letras y otra que no representa ningún fonema.
FONEMAS REPRESENTADOS POR UN DÍGRAFO
a) El fonema africado palatal sordo de, por ejemplo, chaleco, se representa con el dígrafo ch.
b) El fonema lateral palatal de la palabra llave, con el dígrafo ll. Actualmente, en la mayor parte de los territorios de habla español es frecuente la identificación de este fonema con el fricativo palatal representado en la escritura por y (identificación conocida como yeísmo).
c) El fonema vibrante de corro, con el dígrafo rr.
d) El fonema oclusivo velar sordo de queso y el fonema velar sonoro de guitarra se escriben con los grupos qu y gu (delante de las vocales e, i), respectivamente.
LETRAS QUE PUEDEN REPRESENTAR FONEMAS DIFERENTES
a) La c ante a, o, u representa el fonema oclusivo velar sordo de casa, cómodo y cuñado. Ante e, i, como en cepa o cine, puede representar, de acuerdo con el origen geográfico de los hablantes, otros dos fonemas:
- El fricativo interdental sordo, dominante en las variedades españolas habladas en el norte, centro y este de la Península Ibérica, representando también mediante la letra z.
- El fricativo sordo, de articulación mayoritariamente predorsal también en la escritura mediante la letra s. Este fenómeno de identificación, conocido con el nombre de seseo, es general, actualmente, en el suroeste de la Península Ibérica, en las Islas Canarias y en toda la América hispana.
b) La z representa el fonema interdental fricativo sordo de zapato o azul. En zonas de seseo representa también el fonema predorsal equivalente al de la letra s.
c) La ll representa el fonema lateral palatal de lleno o rollo. En zonas yeístas, corresponde también al fonema fricativo palatal sonoro representado en otros lugares mediante la letra y.
d) La g, tanto ante a, o, u y agrupada con otra consonante como en el grupo gu ante e, i, representa el fonema velar velar sonoro, como en gato, gorra, grande, glosa, Gutiérrez, guiso; mientras que ante e, i representa el fonema velar sordo de gemelos y gitano.
e) La r sencilla, tanto inicial de palabra como antecedida por una consonante que no pertenece a la misma sílaba, representa una vibrante múltiple (como en ratón y alrededor), mientras que en posición intervocálica y final de sílaba, así como en los grupos consonánticos br, cr, dr, fr, gr, kr, pr y tr, representa el fonema vibrante simple de caro y brisa.
f) la y puede tener un valor consonántico al representar el fonema palatal sonoro de yema (o llama, en zonas de yeísmo), y un valor vocálico equivalente al representado por la letra i en palabras como y, rey, hoy.
g) La w representa el fonema labial sonoro en palabras de origen visigodo o alemán, como Wamba, Witiza y wagneriano, y el fonema vocálico equivalente al representado por la letra por la letra u en palabras de origen inglés, como whisky y washingtoniano.